Es evidente que Kipling se inspirara en "el niño salvaje" de Francia(ppos. del S. XIX) para crear su "Libro de las Tierras Vírgenes"(1894). Pero en la India, la tierra de Mowgli, ocurrió un echo insólito en las mismas junglas que él recorrió ficticiamente veintiséis años antes. En 1920 el misionero anglicano J.A.L. Singh acudió a una remota aldea de Bengala a realizar un exorcismo porque un "hombre fantasma" estaba atemorizando a los aldeanos. El supuesto espíritu eran dos niñas que habían sido criadas por una manada de lobos. Los lugareños mataron a una loba que protegía a las pequeñas y el reverendo temiendo por sus vidas se las llevó de allí y las interno en un orfanato; donde les dieron los nombres de Kamala y Amala.
Las niñas podían correr a cuatro patas pero no se podían poner en pie. Comían sólo carne cruda y leche, mordiendo y lamiendo como perros. Parecía que no podían reír y tenían el sentido del olfato muy desarrollado. Cuando Amala murió después de un año entre los humanos fue cuando vieron llorar por primera vez a su compañera.
Kamala sobrevivió nueve años en la "civilización" y aprendió a ponerse en pie, a comer carne cocida y a hablar un poco. Al morir se supone que tendría unos dieciséis años, pero una edad mental de tres y hablaba sólo unos treinta vocablos. Es interesante este paradigmático caso porque en él podemos apreciar que el lobo no es tan fiero como lo pintan y observamos la gran adaptabilidad genética de la raza humana. Pero por desgracia hemos ido perdiendo habilidades sensoriales con el paso de los siglos: olfatear una presa o a un enemigo, trepar a un árbol, seguir un rastro.... ¿ Evolución o retroceso en la escala evolutiva?.
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