Alexandros III de Macedonia (356-323 a.C) junto con sus hombres, vieron y admiraron Las Maravillas del Mundo Antiguo. Acamparon a la sombra de las pirámides, disfrutaron de las Maravillas de Babilonia, oraron ante el Zeus de Olimpia y el jóven rey impulsó y acabó el célebre Mausoleo de Halicarnaso. En su adolescencia había tenido como preceptor al mismo Aristóteles y en contra de lo que decía su célebre maestro; que consideraba bárbaros a los orientales, el discípulo soñaba con la sociedad de los iguales, él no hacia distingo entre las culturas orientales y occidentales, quería construir un nuevo mundo más igualitario. Como eje de su proyecto mandó a Dinócrates edificar una nueva ciudad y eligió como emplazamiento una aldea egipcia de pescadores y pastores llamada Rhakotis. Según su plan, la nueva pholis iba a construirse en la lengua de tierra que separa el lago Mareotis del Mediterráneo. La isla de Faros fue unida al continente mediante la calzada del Heptastadion y en ella debería construirse una torre que iluminara a los navegantes. Al este, a lo largo del puerto grande estaba situado el llamado Brucheion, donde se situaron los monumentos que fueron edificando los Tolomeos y los romanos : palacios, templos, el museo con la biblioteca, etc y al S.O el Serapium. Allí descansaron los restos de Alejandro en un féretro de cristal perfectamente embalsamado, cuerpo que llegó a admirar el mismo Augusto en el monumento que le había hecho edificar su fiel general y primer soberano griego de Egipto. Los Ptolomeos la convirtieron en su capital y en metrópoli intelectual y comercial del mundo iluminada por una gran luz, la de su gran faro. El dique que unía la isla a tierra firme era obra de un famoso constructor llamado Dexifanes de Knidos y el arquitecto que diseño el faro fue Sostraro de Knidos, hijo del anterior. La elección de ambos no se dió por casualidad ya que la ciudad de origen de ambos era Knidos, ciudad próspera que exportaba sus cerámicas a Egipto y que había participado en la construcción del Helenio de Naucratis en época faraónica. La imponente torre empezó a construirla Ptolomeo I en el año 299 a.C y fue acabada durante el reinado de Ptolomeo II veinte años después.

"Por ello se ve la torre desde muy lejos de día y de noche que se alza en el éter derecha y empinada. También el marino que navega de noche sobre las olas del mar puede ver en su cima un potente fuego ardiente".
* El faro más antiguo del que se tiene constancia es del s IX a.C situado en el cabo Sigeo, a la entrada del Helesponto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario